viernes, 26 de agosto de 2016

El dilema del erizo en Neon Génesis Evangelion y su fuerte conexión con la Metafísica

Os saludo, amantes metafísicos. En esta primera (y probablemente) última entrada voy a exponer un conjunto de ideas que saqué viendo la serie de los 90 Neon Génesis Evangelion (Shinseiki Evangeion, 1995) dirigida por el director Hideaki Anno y su conexión y referencias a la metafísica y al dilema del erizo.


Neon Génesis Evangelion es una serie original del (ahora) célebre estudio de animación Gainax (FLCL, Tengen Toppa Gurren Lagann) que comenzó a emitirse en octubre de 1995 y finalizó con un total de 26 episodios en Marzo de 1996. Para mayor comodidad la llamaré a partir de ahora "Evangelion". Evangelion cuenta la historia de Shinji Ikari, un chico de 14 años que se mudó de la ciudad de mierda en la que vivía a Tokyo-3 a petición de su padre, el comandante de la organización Nerv, Gendou Ikari. Evangelion se sitúa en un futuro cercano pero muy diferente. El mundo es atacado por seres llamados Ángeles, que causan destrucción y han puesto a la humanidad al borde del colapso en dos diferentes ocasiones, los llamados "impactos" (para que la gente no entrase en pánico, dijeron que las grandes explosiones producidas por un ángel a máximo poder fueron en realidad meteoritos que cayeron en la superficie terrestre). Del primer impacto no se sabe mucho porque fue hace 100 años, pero el segundo marcó gravemente la vida de los protagonistas adultos de una manera u otra. Tras la explosión de uno de los ángeles en el polo norte en un intento de repeler su ofensiva, el nivel del agua aumentó exponencialmente. Es por ello que se tuvieron que construir ciudades a una gran altitud, sobre las originales (por ejemplo, Tokyo-3 se construyó tras el segundo impacto sobre Tokyo-2, que a su vez fue reemplazada por Tokyo tras el primer impacto). Estos ángeles sólo pueden ser combatidos por enormes robots que se conectan en cuerpo y alma al piloto de los llamados Evangelions o simplemente Evas.

Nuestro protagonista se muda para ser un piloto a la capital, donde Nerv tiene su base de operaciones. Como su padre le mandó lejos cuando él era un bebé, su relación nunca fue buena, por lo que se fue a vivir con Misato Katsuragi, la jefa de operaciones de Nerv y su tutora legal. Pero Shinji no es el único piloto (aunque sí el mejor por eso de ser el elegido y todo eso) también están la tímida y poco habladora Rei Ayanami y la egocéntrica tsundere que viene desde Alemania Asuka Langley Soryuu 

(Spoilers muy fuertes a partir de aquí. Si no has visto Evangelion, sal de este blog ahora mismo y ponte a verlo ya. No se me ocurren muchas mejores cosas en las que puedas invertir tu tiempo. Ya volverás a terminar el artículo, que ahora viene lo bueno.)

Evangelion fue extremadamente revolucionario para su época (quizá demasiado), principalmente por tratar temas como la religión de una forma tan cruda y con tanto simbolismo, pero sin duda el más interesante es el dilema del erizo, basado en la parábola del filósofo metafísico por excelencia Arthur Schopenhauer. El dilema del erizo consiste en que cuanto más cercana sea la relación entre dos seres (en el caso de Evangelion, la relación entre Shinji y las mujeres de su vida), más probable será que se puedan hacer daño el uno al otro, al tiempo que, cuanto más lejana sea su relación, es más probable que sientan la angustia y el dolor de la soledad. Cuando Shinj se da cuenta de lo mucho que sufre su tutora Misato por la muerte de un ser querido para ella, sin poder él hacer nada para consolarla, decide que es mejor no tener relaciones cercanas con otras personas para no herir a los demás ni salir herido. La soledad que siente tras esta difícil decisión, juntado con el complejo de inutilidad que sufre por sentirse sólo necesario para pilotar el Eva 01 y el trauma de ser obligado por su padre a matar a la única persona que le quería de verdad tras descubrir que era el 17º y último ángel (en una maravillosa escena con una banda sonora excelente que hace de esa escena algo inolvidable) son lo que conducen a la profunda y aparentemente insalvable depresión de Shinji. El motivo por el que Hideaki  Anno pudo plasmar la depresión de un personaje y cómo llego a ella es debido a que él mismo estaba sufriendo una bastante fuerte). Los dos últimos episodios de Evangelion son una completa ida de olla que ni yo entiendo del todo (The End of Evangelion ayuda, pero en mi opinión, deja más incógnitas abiertas, especialmente con la escena final de la playa), pero el mensaje de amor propio que se da al final en el que Shinji comprende que no tiene que pilotar el Eva si eso le hace sentir mal consigo mismo, aunque decepcione a otras personas, es genial.